Desde la Asociación DACE y su Fundación INDACE se quiere poner en valor el recurso más importante con el que cuentan, su equipo humano. Profesionales con una clara vocación a su labor en lo referido al Daño Cerebral Adquirido (DCA). Es por ello por lo que cada mes se publicará una entrevista a cada trabajador del centro. ¿El objetivo? Que podáis conocer de primera mano la calidad humana de este proyecto.
Ana de la Herranz Real, coordinadora de auxiliares
- ¿Cuál es tu labor en la entidad?
Mi labor en la entidad es de auxiliar de enfermería junto con la coordinación del equipo de auxiliares. Hablo de un equipo ya que sin ellos nuestra labor no seria posible.
Principalmente, mi labor como auxiliar de enfermería es cubrir las necesidades básicas del usuario, cuidando siempre de su bienestar, siendo sus pies y sus manos. Con respecto a la coordinación, me ocupo de organizar el trabajo del equipo de auxiliares y registrar los datos de enfermería que se hacen diariamente; salud e higiene, alimentación y medicación.
- ¿Qué te animó a dedicarte a esta labor?
Nací con vocación, siempre quise dedicarme al mundo de la sanidad y ayudar al que más lo necesita. Por suerte tuve la oportunidad de formar parte de este equipo y ejecutar aquí mi rol profesional, por aquel entonces para mí, un terreno aún desconocido.
Hoy por hoy me siento feliz y orgullosa de poder desempeñar mi labor en esta entidad, realmente te enriqueces de manera personal y profesional.
- ¿Cómo es el día a día en tu entidad de daño cerebral adquirido?
Mi día a día comienza a las 9.00h de la mañana: recibir a los usuarios de la Unidad de Estancia Diurna en el transporte, preparar sus desayunos, ponerlos al día en el taller de actualidad y noticias, participar en los talleres y colaborar en las sesiones del programa de rehabilitación, apoyando desde dentro en las áreas de fisioterapia y terapia ocupacional. Todo esto y más hasta que llegan las 14.00h ¡qué comienza el comedor! ¡Este es el mejor momento del día!
En resumen; apoyo sus necesidades básicas: la alimentación, la medicación, el aseo, la higiene, el apoyo en talleres, en juegos y en su ocio, y lo más importante, como mencioné anteriormente, ser sus pies y sus manos. Ese es el apoyo que muchas veces les falta, esa mano que tiendo para que la agarren fuerte, esa mirada que entiendo y que lo dice todo, ese consuelo al llanto o esa sonrisa que te llena de alegría.
- ¿Qué es lo mejor de tu trabajo?
Principalmente, son los usuarios, ellos les dan sentido a esta entidad y a nosotros. Tengo que destacar la labor de todos mis compañeros, cada uno de ellos pone su granito de arena y hacen que todo funcione día a día.
Algo fundamental para mí es mi equipo de auxiliares, todos y cada uno de ellos aporta algo distinto a nuestros usuarios. Destacar el saber estar de todos ellos, esas risas, el mano a mano, el apoyo, el cariño y sobre todo, nuestra vocación y ¡las ganas que le ponemos día tras día a esta gran familia, a nuestros usuarios!
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