El voluntariado es una de las columnas vertebrales de la Asociación DACE. Sin la labor desinteresada de estas personas, muchas de nuestras actividades no se podrían llevar a cabo. Te contamos la historia de Kiki y Fernando, persona con Daño Cerebral Adquirido y voluntario respectivamente.
Voluntariado y Daño Cerebral Adquirido: la historia de Kiki
Todo comienzo, como casi siempre, con una necesidad de una familia con Daño Cerebral Adquirido. Estas familias forman parte de nuestra entidad y nos piden ayuda para sobrellevar esta discapacidad. En el caso de Kiki, usuario de nuestra Unidad de Estancia Diurna, fueron sus padres los que nos llegaron con un problema vital para ellos. Y es que son personas de edad muy avanzada y durante los fines de semana, cuando Kiki no acude a nuestra asociación, no lo podían tan siquiera levantar de la cama.
¿Qué ocurre si Kiki no puede salir de su cama en todo el fin de semana? Pues que pierde gran parte de su capacidad funcional, siendo en vano todo el trabajo que realizaba durante la semana con nuestros profesionales. Es aquí donde entra nuestro Programa de Voluntariado y Fernando, que es persona voluntaria de la asociación. Gracias a su ayuda desinteresada, Fernando acude los fines de semana a casa de Kiki y lo ayuda a levantarse, pasean por el parque y Kiki puede hacer una vida más normalizada, mejorando así también su capacidad funcional.
Si quieres ser como Fernando y ayudar a personas como Kiki, solo tienes que ponerte en contacto con nosotros a través de este LINK.
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